By accepting you will be accessing a service provided by a third-party external to https://www.iqtec.es/
Seremos breves hoy, aunque eso no quiere decir que lo que digamos sea leve porque nuestra amiga Lola (con la ayuda de su padre) y sus tres amigas han terminado de coser 150 batas y sabemos que se han esforzado muchísimo estos días para sacar ese trabajo adelante.
Lola se las entregó a Mamen, que se perdió un poco buscando su casa y casi se queda atascada en un camino embarrado… No hay quien pare a las costureras de Albares, que nos han entregado otras 217, que hemos hecho llegar al hospital con la ayuda de Marisa, que vive cerca de aquí. La cifra de hoy… ¡1893 batas!
De lo que son las viseras, seguimos enviándolas y cada vez más lejos; la gente sigue ayudando a que se corra la voz.
También nos hemos puesto a imprimir “salvaorejas”, que son unas bandas que se ponen detrás de la cabeza y sobre las que se enganchan las gomas de las mascarillas, así no hace falta engancharlas a la orejas.
Nos han contado los sanitarios que acaba siendo muy molesto llevar esas mascarillas durante tantas horas y días seguidos, y se alegran mucho de que les hagamos unos cuantos "salvaorejas" para que sus días sean un poco más cómodos. Así quedan...
Durante la primera semana del confinamiento oímos un programa de radio y leímos un artículo de prensa que contaba cómo grupos con impresoras 3D habían empezado a organizarse para hacer viseras de protección para servicios sanitarios y ayudar así en la lucha contra la expansión del Coronavirus. Investigamos un poco más sobre este tema y hablamos con uno de nuestros técnicos, aficionado a la impresión 3D, para comprobar que era posible realizar estos equipos.
Llamamos también a amigos que trabajan en UCI, que nos contaron la terrible situación a la que se enfrentaban día a día y la urgente necesidad de obtener material de este tipo. Decidimos rápidamente que podíamos utilizar los recursos productivos de nuestra empresa y apelar a familiares, amigos y colaboradores para juntos contribuir en esta lucha. Con la donación de todos los involucrados, compramos 15 impresoras 3D, hilo de plástico, repuestos, pantallas de PVC y nos pusimos manos a la obra…
A raíz de este primer proyecto, surgió otra necesidad y otra solución. El Hospital de Getafe nos informó que sufrían de falta de batas, pero que podían disponer de tela para coser. Haciendo uso de contactos y nuestra experiencia logística, encontramos varios grupos de costura, esparcidos por Madrid, Guadalajara y Toledo, dispuestos a coser desinteresadamente esas prendas tan necesitadas; con todo a favor, decidimos organizar esas tareas para encajar las piezas del puzzle, planificar la recogida de materias primas y coordinar la confección de batas para ese hospital.
Este blog es un diario del proyecto...